COMPOTA
Había pensado robarte el corazón por un momento
machacarlo un poco
hasta formar una masa consistente y sin grumos
añadirle azúcar
-bastante por si acaso-
un poco de canela y clavo
y dejarlo hervir en un baño de oporto dulce
hasta que adquiera nuevamente un color rojo brillante.
Una vez que se reduzca y tome la forma de masa cardiaca
retiramos del fuego y lo colocamos en su cavidad.
Será entonces cuando vuelva a latir.