INANICIÓN CULPOSA
Le di un pitillo de hashís a uno de los hombres que duermen en el cajero del Bulevar. No tenía nada más para darle y le ofrecí el porro, creí que no estaría mal que se diera un gustillo. Después me inquieté un poco pensando si había hecho mal, pues el porro probablemente le había generado más hambre de la que tenía. Pronto me olvidé del asunto, hasta que repetí la acción, ésta vez con otro vagabundo en la estación de trenes. En las últimas semanas ocurría que cuando estaba fumando un canuto, casualmente veía a alguien mendigando, y nunca se negaba a aceptar una fumada, o incluso lo que quedaba del cigarrillo, intuyendo que podría aminorarles la tensión que se genera en el cuerpo a causa del frío.
Esta mañana mientras conducía escuché en la radio algo que me dejó pasmado. Cuando la locución comenzó a hablar de la proliferación de mendigos que habían sido atendidos por inanición, sentí cómo ese sudor frío característico de las situaciones de terror me recorría todo el cuerpo.
La imagen me perturbó sobremanera, presintiendo que ahora estarían por todas partes intentando conseguir un mendrugo de pan, o lo que es peor, otra droga que aminorara la sensación de hambre. ¿Y si mientras eran atendidos por los servicios sociales, mencionaron a ese ser despiadado que les había ofrecido, sin ningún tipo de remordimiento, un porro para provocarles más hambre y así terminar con su existencia? Me sentía realmente culpable y no sabía cómo remediar la situación. Por si las dudas, me limité a fumar canutos exclusivamente delante de mis amigos y a compartirlos con ellos, así no quedarían restos qué guardar. Jamás volví a toparme con los vagabundos a quienes, de muy buena gana, les habría obsequiado otro pitillo.
Deja de fumar hachís o este se ira comiendo la energía que tienes hasta que ese vagabundo del que hablas sea una persona vital y enriquecida comparada contigo. Lo del hambre es lo de menos. La energía amigo… perderás tu energía y al no poder llevar a cabo tus deseos y las acciónes de tu vida iras acumulando una nube negra en tu interior que se irá haciendo cada vez más y más grande. Te lo digo por pura experiencía. Un abrazo
Me gustaMe gusta
Jajajajaja, es un cuento, sin más. No fumo ni hashis, ni naa, aunque por lo que escribo a veces lo parezca.
Me gustaMe gusta
Qué ocurrencia de historia jajaja. Todo lo que escribimos muchos creen que es verdad.
Me gustaLe gusta a 1 persona