LA ESTAMPA

andaluciaimagen54451_0.8mb_0

Parecía como si el horizonte fuera a resquebrajarse. En tan solo un instante, un manto de nubes negras se posó sobre el paisaje que había permanecido grisáceo durante la mañana. Aquel fino haz de luz abría una grieta entre los nimbos a punto de estallar, a la vez que teñía el mar con una tonalidad verde turquesa. Aquella estampa con toda su melancolía, se había hecho hoy un hueco en su memoria.

En esa carga de nubes estaban los recuerdos de una promesa que nunca se cumplió, tal vez porque nunca la hubo. Un rugido distante activó la descarga y toda el agua allí condensada se derramó, mezclada con las ilusiones, los anhelos y las esperanzas. De la misma manera, él observaba con sus ojos grises, cómo se iban diluyendo cada uno de sus sueños en cada gota.